Ventanas eficaces contra el ruido de la calle: cómo deben ser para aislarse de él

Persona tapándose los oídos en casa para protegerse del ruido de la calle

La contaminación acústica en las ciudades se ha convertido en un grave problema para muchas personas que, a diario, la sufren en sus hogares. De manera continua e incesante, escuchan el molesto sonido del tráfico, de conversaciones en la calle, de locales comerciales cercanos…, hasta el punto de convertirse en un problema de salud.

12 de septiembre de 2024

No es solo incomodidad o una molestia. El ruido tiene efectos muy negativos en la salud humana, como pérdida de audición y acúfenos, estrés fisiológico, problemas cognitivos, alteraciones del sueño o irritabilidad. Todo ello incrementa el riesgo de desarrollar enfermedades como arteriosclerosis o diabetes, enfermedades del corazón y del sistema circulatorio, o enfermedades respiratorias.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera el ruido causado por el transporte como la segunda causa ambiental de enfermedades en importancia en Europa, por detrás de la contaminación del aire por partículas. Algunas cifras que ilustran la magnitud del impacto del ruido, según la OMS y la Agencia Europea de Medio Ambiente (AEMA), son que 95 millones de personas están expuestas a niveles nocivos de ruido del tráfico rodado en Europa y que el 20% de la población urbana europea está expuesta a niveles considerados nocivos para la salud.

Persona tapándose los oídos en casa para protegerse del ruido de la calle

En España, la contaminación acústica provoca cada año más de 1.000 muertes prematuras y 4.000 hospitalizaciones derivadas; además de los más de 2 millones de personas que sufren problemas relacionados con el descanso nocturno, según la AEMA. Entre la población más afectada se encuentran grupos vulnerables, como personas mayores, embarazadas, personas de bajos recursos y aquellas con enfermedades previas.

En la mayoría de los casos, este daño se produce poco a poco, sin que nos demos cuenta de ello. El hecho de no ser conscientes hace que no se le dé importancia hasta que ya es demasiado tarde, según los expertos. En este sentido, es muy importante que se adquieran unos hábitos auditivos que ayuden a generar menores niveles de ruido y acostumbrarnos a protegernos cuando no podemos evitarlos.

Las ventanas, barreras contra el ruido

El 50% de las viviendas en España son anteriores a 1980; por lo que tienen un aislamiento deficiente si no se han reformado después. En el caso de que el inmueble se haya construido con posterioridad a esa fecha, ya incorporará un aislamiento más adecuado, pero no con los niveles que se exigen ahora.

Actuar en paredes, suelos, techos y ventanas es esencial para aislar el hogar no solo térmicamente, sino también acústicamente. Como expertos en ventanas, en Hermet 10 comprobamos a diario cómo una de las razones para cambiar las ventanas entre quienes acuden a nosotros es, precisamente, la de combatir el ruido de la calle con el objetivo de asegurar el máximo confort en el interior.

Zona céntrica ciudad

Seguramente que has constatado en alguna ocasión en casa de algún familiar o amigo o en un hotel céntrico en el que te hayas alojado, ubicados en una zona bulliciosa, cómo las ventanas actúan como auténticas “barreras” frente al ruido. ¿Cómo puede ser?

Tienes que pensar que la ventana no dejar de ser un elemento que “tapa un hueco” en la fachada, que da directamente a la calle, a un patio interior, etc. Igual que la pared, necesita tener material aislante, es decir, que no conduzca el frío ni el calor ni deje pasar el ruido.

Un buen aislamiento en las ventanas requiere el uso de un material altamente eficaz y duradero, como el PVC. Así, una ventana oscilobatiente con juntas de goma de alta calidad en todo el perímetro proporciona un cierre hermético que nos aislará adecuadamente. Pero aún nos queda una parte muy importante (y que es la que más espacio ocupa): el vidrio.

El vidrio, un componente clave de la ventana

Como te explicábamos antes, hasta hace solo unas pocas décadas, en España no había una normativa rígida en cuanto a cerramientos y podía instalarse sin problema un vidrio monolítico en viviendas, también llamado simple; es decir el constituido solo por una única lámina.

Actualmente, esto está totalmente en desuso y todas las ventanas, por motivos de seguridad, deben incorporar, como mínimo, un doble acristalamiento. Aquí te explicamos más en detalle la diferencia.

Vidrio con tratamiento acústico

Si tienes problemas de ruido en la zona en la que te encuentras, este doble acristalamiento puede incorporar un tratamiento acústico en uno de los vidrios. Ello, sumado a un correcto espesor de la cámara de aire entre los cristales, reducirá notablemente la entrada de ruido.

Miniatura vídeo ruido

La importancia de una correcta instalación

El ruido se filtra por cualquier mínimo espacio, al igual que el frío o el calor. Por este motivo, una instalación profesional de la ventana en el hogar es imprescindible para beneficiarnos de todas las ventajas de nuestras nuevas ventanas.

Si al colocar las ventanas no quedan bien selladas al edificio, entrará el ruido, además de corrientes de aire y el frío o calor del exterior. De ahí la relevancia del correcto trabajo de instalación, efectuado de forma profesional a través de un establecimiento de confianza. Sin duda, una mala instalación arruina una buena ventana.  


Si estás pensando en cambiar tus ventanas para poner fin a los problemas de ruido en tu vivienda porque vives cerca de un aeropuerto, de las vías del tren, de una autovía, de locales de ocio, etc., en Hermet 10 te invitamos a que te acerques a una de nuestras tiendas para comprobar por ti mismo los diferentes tipos de ventanas de los que disponemos y cómo pueden ayudarte a solucionar tu problema.

Puedes encontrar la más cercana aquí y agendar tu visita o, si lo prefieres, podemos prepararte online tu presupuesto sin compromiso. Para ello, solo tienes que explicarnos aquí qué es lo que necesitas. ¡Estaremos encantados de ayudarte!


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