Cómo limpiar y mantener correctamente las ventanas de PVC

Limpieza ventanas

Con una limpieza tan solo con una bayeta, agua y jabón neutro y un sencillo mantenimiento periódico, conservarás tus nuevas ventanas intactas durante toda su vida útil, de hasta 50 años.

19 de febrero de 2024

A diferencia de otros materiales, las ventanas de PVC no requieren un costoso mantenimiento ni una limpieza con productos complejos. Siguiendo las recomendaciones de uso y mantenimiento que te damos en este artículo, disfrutarás de unas ventanas como nuevas durante toda su extensa vida útil, de entre 30 y 50 años.

Limpiar el vidrio con un limpiacristales es la parte más conocida de la limpieza que necesita una ventana. Sin embargo, no debes olvidarte de los perfiles, ya que también el contorno del vidrio acumula suciedad procedente del polvo o de la contaminación.

Para ello, emplea agua tibia con jabón neutro y aplica esta mezcla con una bayeta, un trapo suave o una esponja que no raye. No utilices abrasivos, disolventes clorados, acetona, alcohol u otros productos susceptibles de atacar la carpintería.

Asimismo, recuerda limpiar las canaletas de recogida de agua y los orificios de evacuación.

En el caso de ventanas correderas, limpia también regularmente los raíles con un aspirador para que no haya elementos que impidan su deslizamiento.

Comprueba anualmente el correcto funcionamiento del herraje, los mecanismos de cierre y de maniobra. En caso necesario, engrasa los puntos de roce y desgaste con vaselina técnica o grasa líquida; no con aceites antioxidantes, ya que son corrosivos.

Esto los protegerá de la acumulación excesiva de polvo y suciedad y permitirá un funcionamiento más fácil y fluido. Estos productos suelen estar disponibles en prácticos envases para una aplicación precisa.  

En el caso de las juntas de goma, mantenlas también engrasadas para evitar que la radiación solar y los cambios de temperatura las dañen y se provoquen fugas en las ventanas. Aplica vaselina técnica u otro producto específico para el cuidado de las juntas con un paño suave y deja la ventana abierta media hora aproximadamente hasta que se sequen.

Es importante que este mantenimiento sea continuado en el tiempo especialmente en las viviendas situadas en zonas costeras o ambientes salinos; en zonas con alta contaminación; o cuyas ventanas apenas se utilizan de manera continua.

Cuando se vayan a llevar a cabo trabajos en la fachada de tu vivienda o dentro de alguna de sus estancias, como pintar las paredes por ejemplo, recuerda proteger las ventanas de esas zonas.   

Si compruebas que las ventanas no cierran bien y que el herraje tiene que ser ajustado, ponte en contacto con un técnico especialista para que realice esta tarea de manera segura. En ningún caso descuelgues las hojas de la ventana para efectuar estos trabajos de mantenimiento, ya que podrías lesionarte.

10 recomendaciones básicas de uso y mantenimiento


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